La población senior es un colectivo nutricionalmente vulnerable al que se debe prestar especial atención para evitar posibles desequilibrios en su alimentación. En este artículo ofrecemos recomendaciones sobre la importancia de un adecuado aporte proteico en esta etapa.

‘Nosotros te conocemos, tú escoges’, de L’Onada Serveis, y ‘Menú de buenas prácticas’, de la Fundación Matia de San Sebastián (Guipúzcoa), son los dos proyectos ganadores de la segunda edición de los Premios Nutrisenior a las buenas prácticas alimentarias, una iniciativa que pretende reconocer los mejores proyectos llevados a cabo para mejorar la nutrición de las personas mayores.

El calcio es un mineral imprescindible para el buen mantenimiento de la estructura ósea y otras funciones esenciales en el organismo. Además, la vitamina D es la principal responsable de su absorción y metabolismo. En la población anciana, la salud ósea se ve debilitada, por lo que un aporte adecuado de calcio y vitamina D a través de la alimentación adquiere especial relevancia.

Hace unos días nos llegó del Hospital de Molina (Murcia), la buena noticia de que el centro ha puesto en marcha una Unidad de Nutrición Hospitalaria, convirtiéndose así en el primer hospital en la Región de Murcia, y pionero en España, en incorporar a su plantilla a un dietista-nutricionista colegiado.

Seguimos una semana más con la publicación de las recetas de Bel Foodservice. Hoy con una receta especialmente pensada para el colectivo senior, la ‘Sopa minestrone con crema de queso La Vaca que ríe Fórmula Plus’; una especialidad italiana con un aporte nutritivo extra gracias a la crema de queso que aporta proteínas de alto valor biológico y matiza el sabor de las verduras.

La AEHH (Asociación Española de Hostelería Hospitalaria) ha sido la última en unirse a Alianza Másnutridos, para aunar esfuerzos contra el problema de la malnutrición en el entorno sociosanitario. No hay que olvidar que la desnutrición relacionada con la enfermedad constituye un problema sanitario de elevada prevalencia y altos costes que afecta a unos 30 millones de personas en Europa y conlleva un coste asociado de unos 170.000 millones de euros anuales.