A partir del próximo lunes, doce empresas del sector de la restauración colectiva empezarán a distribuir más de 8.000 menús diarios a los escolares perceptores de la renta mínima de inserción, de la Comunidad de Madrid. Tras la polémica suscitada con el tema ‘Pizzayuso’ durante los dos últimos meses, el servicio alcanza la normalidad de la que no debía haber salido, y garantiza menús de calidad y nutricionalmente equilibrados a todos los niños y niñas de las familias más vulnerables de Madrid.

Hemos entrado en la ‘fase 1’ del desconfinamiento (por lo menos en algunas provincias) y la restauración puede empezar a reabrir sus negocios y a reanudar servicios. Aunque el horizonte aún se ve lejano por las dudas y dificultades que conlleva esta ‘desescalada’, todas las empresas deberán estar preparadas y tener adecuadamente formados/as a sus trabajadores/as para afrontar y responder con garantía, a los nuevos peligros biológicos asociados al SARS-CoV-2.

La restauración colectiva estima unas pérdidas del 15% en los dos últimos meses tras el cierre de comedores escolares, restaurantes de empresa, cafeterías de hospitales y la cancelación de actividades de ocio y eventos. Una situación que ha supuesto ya la disminución en 539 M€ de la facturación anual del sector y un 53% del personal en ERTE. Solo en el sector de la enseñanza se calcula una bajada de 344 M€ de facturación y que casi todos sus trabajadores se encuentren en situación de ERTE.

El sector de la restauración colectiva (RC), a través de su federación Food Service España, no entra a valorar las decisiones del gobierno de la Comunidad de Madrid respecto al ‘tema Tele Pizza’, pero reitera, tal como se hizo en cuanto cerraron los colegios, la disposición y capacidad de sus empresas para prestar este servicio en las condiciones idóneas y cumpliendo todas las exigencias y requisitos nutricionales del servicio.